No recuerdo de qué pintor era esta serie de imágenes pero sí que pensé que alguien que es capaz de mirar así a un animal debe tener una sensibilidad especial. Las recorté de un dominical de no sé que periódico allá por los noventa y... pero siguen siendo muy particulares.
Cierto, destilan ternura. Abrazos.
ResponderEliminarGracias,y gracias por seguir este blog que es poco seguido y muy personal.
EliminarUn abrazo