En una época como la actual, en la que todo es diseño digital, y Photoshop a diestro y siniestro, estas ilustraciones creadas a pulso y con esta sublime delicadeza resultan especialmente llamativas y encantadoras, y evocan un tiempo en el que todo esto se hacía con exquisito cuidado y, ¿por qué no decirlo?, con mucho amor. Por cierto, me he informado de que esta revista fue la primera en utilizar el papel cuché en España. Qué pena que luego se prostituyera tan noble material. Un saludo.
Como casi siempre: de acuerdo. Como consuelo su archivo y el nuevo museo de la ilustración que recoge esto y más. Lo peor es que no ha habido heredero de esto, por buena que sea la publicación o se pasa de moderna con lo que no se entiende la ilustración o es tan zafia y adocenada que ni siquiera merece llamarse ilustración, pintadas y de las malas como mucho.
En una época como la actual, en la que todo es diseño digital, y Photoshop a diestro y siniestro, estas ilustraciones creadas a pulso y con esta sublime delicadeza resultan especialmente llamativas y encantadoras, y evocan un tiempo en el que todo esto se hacía con exquisito cuidado y, ¿por qué no decirlo?, con mucho amor. Por cierto, me he informado de que esta revista fue la primera en utilizar el papel cuché en España. Qué pena que luego se prostituyera tan noble material. Un saludo.
ResponderEliminarComo casi siempre: de acuerdo. Como consuelo su archivo y el nuevo museo de la ilustración que recoge esto y más.
ResponderEliminarLo peor es que no ha habido heredero de esto, por buena que sea la publicación o se pasa de moderna con lo que no se entiende la ilustración o es tan zafia y adocenada que ni siquiera merece llamarse ilustración, pintadas y de las malas como mucho.